jueves, 9 de octubre de 2008

CGT Prouctions presenta: ¡LOS LIBERADOS!



El Argumento: El consejero de Sanidad de una próspera Comunidad —un joven apuesto, trabajador y sobradamente preparado— se dirige, junto a su Presidenta, a inaugurar un moderno hospital público, dotado de los más avanzados equipamientos y comodidades. Aparentemente, todo va sobre ruedas: los médicos están encantados y los pacientes se sienten bien atendidos. Es un día feliz para todos. ¿Para todos? ¡No! Cuando el joven consejero llega a la puerta del nuevo y flamante hospital, es atacado por una rabiosa jauría de sindicalistas disfrazados de médicos. Son… ¡LOS LIBERADOS! El liberado-jefe, un vociferante energúmeno con coleta menguante y barriga creciente, y su comandanta en jefa —alias “ojos de mosca”—, disparan al consejero toda suerte de improperios y amenazas, a bocajarro y sin anestesia. Nuestro héroe, manteniendo la sangre fría y la sonrisa caliente, trata de poner a salvo a su Presidenta. Los liberados, cada vez más rabiosos, incrementan las ráfagas de insultos y espumarajos verbales. Pero en vano. El joven consejero finaliza su misión con éxito y sin sufrir daño ni físico ni moral. Los Liberados son vencidos y el nuevo hospital público queda inaugurado.

La crítica: En estos tiempos de crisis galopante, paro a granel, sueldos congelados y cinturones asfixiantes es, cuando menos, curioso el tema éste de los liberados sindicales de la Sanidad. Resulta que son unos tipos (y tipas, faltaría más) que cobran su sueldo íntegro sin trabajar. Lo repito y subrayo para que no queden dudas: COBRAN SU SUELDO SIN TRABAJAR. Así, como suena. Eso significa, por ejemplo, que un celador de hospital que no trabaja de celador (ni de ninguna otra cosa) en el hospital está cobrando del hospital su sueldo enterito de celador de hospital por el morro y sin sentir la más mínima vergüenza. ¿La excusa? Su dedicación íntegra a la labor sindical, o sea, a defender los intereses laborales de los trabajadores que trabajan (y mucho) para cobrar su sueldo (más bien poco). Pues de estos parasitillos de pasillo parece ser que, sólo en la Sanidad de la Comunidad de Madrid, hay 3.242. Repito para que no haya dudas: tres mil doscientos cuarenta y dos sinvergënzas.

No sé ustedes, pero yo lo he descubierto a raíz de las agresiones que sufrieron el pasado lunes Esperanza Aguirre y su consejero de Sanidad, Juan José Güemes, en la inauguración del Hospital Puerta de Hierro-Majadahonda (ver vídeo). Parece ser, además, que son un grupo de liberados reincidentes cuya única ocupación consiste en ir de inauguración en inauguración de hospitales PÚBLICOS en la CAM (¡y van 10!) para protestar enérgicamente contra la sanidad PRIVADA. Bonita incongruencia. Y encima, disfrazados de médicos, con sus batas blancas y todo, cuando el grupo lo conformaban un operario de máquina de impresión y reprografía (el de la foto), una auxiliar de enfermería, una administrativa y un celador (afiliados a los sindicatos CGT y CC.OO.)

Los Premios: Premio "Doctor Zhivago" a la Presidenta de la CAM por inaugurar otro magnífico Hospital público (¡y van 10!), a pesar de los bolcheviques; Premio "Dr. House" al consejero Güemes por su entereza, diagnosis y victoria frente a esta panda de parásitos sinvergüenzas y vagos; Premio "Dr. No" a los Liberados de Sanidad por no trabajar, no pensar y no evolucionar, más un premio especial del jurado de 14 horas diarias de trabajos forzados en un hospital de Bombay.

Próximamente, la décimo primera entrega de la saga: "La rebelión de los pacientes de San Carlos" (vea aquí un avance)